
Supongo que todos, tanto bloguero como lectores, no tenemos que recurrir a los famosos seis grados de separación para encontrar a algún ser querido que se nos haya ido en la carretera. Yo puedo mencionar –y mandarles un recuerdo- a mis primos Íñigo y Bruno, a mi ex compañero y siempre amigo Mijail, y a mi amigo Monchín, que es el único de los cuatro que queda para leer esto –habitualmente lo hace-, aunque la bestia parda que se llevó por delante su moto le ha dejado para siempre caminando como House. Eso sí, les garantizo que no ha perdido su sentido del humor... bastante más sano que el de House.
Y el mundo del cine tampoco se ha librado. Un somero repaso a los actores fallecidos en accidente arroja nombres como Jayne Mansfield, la rubia explosiva que fue lanzada en su día como una respuesta a Marilyn, y cuyo coche se empotró de madrugada contra la tra

Pero nos estamos dejando al más famoso de todos.
Sobre el accidente de coche que mató a James Dean se ha hablado y escrito mucho, y ha dado no poco material a aficionados a las anécdotas e investigadores de lo para anormal, tipo Friker Jiménez. Se sabe que le pusieron una multa por exceso de velocidad dos horas antes del accidente; y una investigación exhaustiva demostró que el actor, en contra lo que se rumoreó, no sobrepasó los límites de velocidad cuando se pegó el topetazo con su Porsche. La anécdota más conocida, posiblemente, es el hecho de que, unos días antes de su muerte, grabó una película para la prevención de accidentes de tráfico, donde reconocía haber hecho el loco con los coches cuando era más joven y recomendaba a los chavales que condujeran con cuidado, porque “la vida que salvéis puede ser la mía”.
Gracias a Internet, quienes quieran ver el spot lo tienen aquí:
P. D. El Crash utilizado en el título de esta entrada –y en la primera foto- no hace referencia a la oscarizada película de Paul Haggis, sino a otra, menos popular, dirigida por un David Cronenberg más tortuoso que nunca, que ya es decir, sobre un grupo de personas que se excitan sexualmente con los accidentes de tráfico. Hay gente pa tó, como decía aquél.
P. P. D: Por cierto, el actor que aparece en el corto haciendo como que entrevista a Dean es Gig Young, uno de los grandes secundarios de los años 50 y 60 que ganó el Oscar al Mejor Actor Secundario por Danzad, danzad, malditos (1969). En 1978, tres semanas después de casarse con su quinta esposa, 43 años más joven que él, la mató de un tiro y luego se suicidó.
Vaya, me ha quedado esto un poco macabro hoy… venga, mañana hablamos de Mariano Ozores (por lo menos).
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