lunes, agosto 27, 2007

Deconstruyendo a Bond




Ya, ya sé que ayer dije que hoy iba a tocar el asunto de las subvenciones (aunque de modo un tanto particular), pero la programación televisiva me ha obligado a cambiar de tercio. Quédese para mañana -esta vez sí, sin falta- el post prometido, y vamos al tema que se nos ha colado, inspirado por la emisión, esta noche a las diez, de la película Vive y deja morir, dentro del ciclo dedicado al agente 007 que Telemadrid lleva emitiendo todo el verano.


Teníamos a Bond un poco abandonado desde el estreno de Casino Royale, y la verdad es que Vive..., dentro de la serie, es bastante particular. Constituyó el segundo intento de los productores de reemplazar a Sean Connery y, después del (semi) fracaso obtenido con George Lazenby, Albert R. Broccoli y Harry Saltzman no quisieron correr riesgos. No les bastaba con conseguir por fin a Roger Moore como protagonista (antes no habían podido por los compromisos del actor con la serie El Santo); se trataba de lograr que el público lo aceptara como Bond, sin fisuras de ningún tipo. Y esta vez, en lugar de apostar con el continuismo, como con Lazenby, huyeron como la peste de muchos lugares y escenas que Connery había hecho familiares, para evitar que el público hiciera cualquier comparación (que siempre son odiosas). Así, si ven ustedes (por lo menos los lectores de Madrid) esta noche la película, estas son algunas de las cosas que echarán de menos:



1. Bond no lleva smoking en ninguna escena (ni siquiera en el cartel publicitario).


2. Tampoco pide ningún martini de vodka, agitado o removido (por cierto, un día de estas vamos a tener que aclarar este tema, y otras cosillas, sobre el martini. Me lo apunto).



3. 007 no va al despacho de M para que este le encargue la misión; en lugar de eso, es M (y Moneypenny) quienes van a su casa (por cierto, una de las poquísimas veces en la serie en que vemos el domicilio de Bond).



4. El actor Desmond Llevelyn, y su personaje Q, no aparecen por ninguna parte, para evitar la famosa escena de “preste atención, 007” donde se le hace entrega de los gadgets habituales. Sí lleva un reloj lleno de trucos, pero es Moneypenny quien se lo da.



Por supuesto, una vez el público aceptó a Moore como Bond, todas estas escenas regresaron en las siguientes películas. A todo esto, hay rumores de que la nueva entrega de Bond tendrá un tono mucho más ligero que Casino Royale… ¡Después del papelón que ha hecho Daniel Craig! ¿Le acabaremos viendo arrugado como una pasa y levantado una ceja?


Mañana retomamos las subvenciones (salvo imprevistos, ejem…). Mientras, sigan votando.

1 comentario:

LE BLOG dijo...

Roger Moore ha sido mi favorito hasta que ha aparecido Daniel Craig, así que tendré que echarle un vistazo a la de esta noche a ver realmente quién gana.