Se está hablando hoy mucho de Paul Newman como posible candidato a los premios Príncipe de Asturias. A sus 82 años, cabe pensar que el actor estaría en la edad de retirarse y empezar a recibir homenajes, a pesar de que continúa trabajando y conduciendo sus coches deportivos tan rápido como puede. Por no hablar de lo bien que se conserva aunque, como confesó recientemente a un periodista, el truco puede ser que "no he bebido agua desde 1951".
De Newman no sólo se conoce su talento interpretativo, sino también su afición a las carreras de coches, sus labores humanitarias o su compromiso político. Es menos conocida su afición a las bromas pesadas. Entre las más conocidas está la vez que, filmando Buffalo Bill (1976) le robó al director Robert Altman su par favorito de guantes, y se los sirvió fritos en el almuerzo. También se dice que, tras intentar repetidas veces ser recibido por el director George Roy Hill (Dos hombres y un destino, El golpe, El castañazo) acabó entrando por la fuerza en su despacho y le partió en dos la mesa con una sierra mecánica. No es muy posible que esta anécdota sea verdad, porque se parece demasiado a una escena de Newman en la película Casta Invencible (1971).
miércoles, septiembre 13, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario